Abarth 124 Spyder: imposible no enamorarse
Cuando
programas la prueba de un deportivo roadster que viene con el apellido
Abarth, los nervios y la ilusión es fácil que florezcan en cualquier
momento. Se ha escrito y hablado mucho del 124 Spider y todo lo que se
dice es bueno, pero la emoción aparece por momentos a la hora de
confirmar la fecha de la cesión.
Dejando de lado las emociones y acercándonos a la realidad, escribir
sobre cualquier coche que este “infectado” por el escorpión de Abarth,
son palabras mayores. La consecuencia final es que estamos ante
un autentico deportivo, con una carrocería y diseño a prueba de bombas
y la inyección extra que supone el “veneno” Abarth: el resultado
positivo está asegurado.
La verdad es que las cifras de potencia que rinde el pequeño 124 Abarth
te hacen pensar que, ante todo vamos a estar ante un coche divertido de
conducir, ágil y sobre todo contundente: poco más de 1.000 kg, 1.4
turbo y 170 cv… uff los dientes se ponen largos.
Como información general, debemos recordar que este modelo se ensambla
en Japón, en la isla de Hirosima, en la misma planta que su primo el
MX5. Se diferencia de este en la carrocería, algo más clásica en el 124
y 14 cm mas larga y en la elección del propulsor, que como ya he
comentado es el 1.4 Multiair ya montado en otros modelos de los
italianos.
Antes de salir a la calle, de Hirosima pasa a Mirafiori (Italia), donde
recibe la mordedura del Escorpión en forma de : Suspensiones Bilstein
con puesta a punto específica, Diferencial autoblocante con tarado
específico, Escape deportivo Record Monza, Frenos delanteros Brembo de
4 pistones, Elementos decorativos interiores y exteriores específicos…
Un perlita…..
AMOR A PRIMERA VISTA
Lo había visto en fotos, en videos, había leído mucho sobre él… pero
cuando lo ves en vivo y en directo… algo te invade y hace que lo tengas
que mirar dos veces. Siiiii, es real y voy a poder usarlo. Miras el
reloj y piensas, …tengo algo mas de tres horas antes de mi próxima
cita… Hay que disfrutarlo.
Abres la puerta y te
fijas en los asientos, de cuero bicolor que te están esperando con los
brazos abiertos para que te acomodes en el habitáculo. Menos mas que no
somos muy altos, ya que la altura del techo y la altura a la que
estamos del suelo dificulta ligeramente el acceso… pero claro, estamos
ante un deportivo. Si no superas los 1.80 metros no tendrás muchos
problemas...
Después del primer impacto visual, toca disfrutar. En primer lugar
intentar envenenarme con el ambiente que proporciona el escorpión en el
habitáculo del 124: volante de cuero, palanca de cambios, baquets,
tacto de los pedales, cuadro de relojes… No exagero, fueron varios
minutos disfrutando del embriagador ambiente que se respira dentro del
Abarth 124 Spyder.
Sin duda estamos ante un coche que va a acaparar muchas miradas en
parado, tantas casi como cuando lo arranquemos. La acertada carrocería
bicolor en rojo y negro, unas bonitas llantas que dejan ver las enormes
pinzas de freno Brembo en rojo serian detalles mas que suficientes para
ser los reyes del parking.
Pero si ademas,
en menos de 5 segundos, le quitamos la capota, desde luego el triunfo
esta asegurado. Quiero comentar que lejos de complicados artilugios
electrónicos de apertura de la capota, los de Fiat han optado por una
capota manual simple y sencilla de usar, que permite quitar y
poner en un abrir y cerrar de ojos en tiempo récord. Sin necesidad que
quitarnos el cinturón y esperando a que el semáforo se ponga en verde,
antes de que de tiempo a pensar si lo hacemos o no, ya estaría hecho y
preparados para emprender la marcha de nuevo.
Un interior que rezuma deportividad y calidad por los cuatro costados
que es una clara declaración de intenciones del biplaza. La
posición de conducción baja con las piernas estiradas y un tacto duro y
preciso de los mandos dotan del toque definitivo para que nos
planteemos si estamos ante el coche de nuestra vida.
Por fin llega la hora de la verdad y hay que darle al botón para que
arranque el pequeño motor 1.4 turbo de 170 caballos. Madre mía… ya me
tiene loquito. Que sonido… y eso que estamos al ralentí. Las preciosas
colas de escape metálicas son las culpables del bronco sonido que, no
sabemos si es realmente efectivo con el 1.4 o son simplemente un
detalle más que aumenta la personalidad de deportivo del Abarth. A mi,
personalmente, aumente o no las prestaciones, me encanta.
La realidad es que las cifras y los datos invitan a pensar que la
deportividad esta asegurada. Los poco más de 1.000 kilos para 170
caballos, tracción trasera y diferencial autoblocante seguro que se
transforman en emoción a la hora de conducirlo.
DISFRUTANDO DEL PASEO
Los primeros
kilómetros de contacto con el 124 son por autovía y pronto las
sensaciones que transmite son claras. Por encima del alto confort de
marcha esta la efectividad y, si superas los 140 km/hora (no olvidemos
que el limite legal es 120 km/hora) el sonido del escape y de la capota
es considerable. La suspensión es dura y efectiva pero tampoco los
ocupantes sienten en exceso las sacudidas de la misma.
Dejando de lado las largas rectas de las autovías, las curvas de las
carreteras nacional van llegando al mismo tiempo que lo hace también la
diversión. Es un autentico placer acercarnos a la zona alta de las rpm
para sentir como empujan los 170 caballos a los 1.000 kilos. Es en este
punto donde mas agradecemos una suspensión firme y unos frenos
efectivos...
Lo bueno que tiene este coche es que gracias a su configuración de
deportivo con tracción trasera, es que en los trazados regados de
curvas, gracias a su excelente relación peso/potencia, el escalonado de
su caja de cambios y el funcionamiento brutal de sus frenos, permite
disfrutar de una manera increíble sin superar en ningún momento las
velocidades legales.
Buena aceleración, frenada increíble, funcionamiento del diferencial
autoblocante, aderezado con un precioso sonido que inunda el ambiente,
¿necesitamos mas? No, ni mas caballos ni mas velocidad, simplemente
disfrutando de la conducción.
RESUMIENDO
¿Cumple para lo
que fue diseñado? Si el objetivo del Abarth 124 Spider es, dejar con la
boca abierta a quien lo ve estacionado, o a quien lo escucha a tope de
vueltas por una carretera de montaña, o si lo que quieres es quitar la
capota en una tarde de primavera y disfrutar del aire en tu cara, o
simplemente verlo cada dia en la puerta de casa y tener la sensacion de
que es el coche de tu vida, el objetivo está superado con creces.