VW T-Roc 1.0. Siguiendo las tendencias
Esta claro que las marcas
de coches están al tanto de las tendencias del mercado y de las preferencias de
los consumidores. Las ciudades están plagadas de SUV de diferentes tamaños,
desde los urbanitas hasta los mas grandes y, raramente, alguno de ellos toca
algo que no sea el negro asfalto.
Es un bocado que ninguno
de los fabricantes quiere perder y todos, o casi todos, tienen presencia en
todos los segmentos. VW es uno de ellos y el T-Roc es un claro ejemplo de lo
que acabo de decir. Un Crossover o SUV urbano que no deja indiferente a nadie y
que marca la línea de lo que puede ser VW en el futuro.
CERCANO AL GOLF
En este punto podemos
tener un dilema, ya que por medidas es muy parecido al GOLF. Tiene una longitud
total de 4.234 mm y una batalla de 2.603 mm, por lo que sus voladizos tanto
delanteros como traseros son bastante discretos, un detalle que deja una clara
muestra de que su hábitat natural va a esta lejos de los caminos. La anchura
total es de 1.819 mm y la altura llega hasta los 1.573 mm, unas medidas que lo
sitúan entre lo que podríamos llamar SUV de medio tamaño.
Utiliza la misma
plataforma modular MQB que sus hermanos de gama el Golf y Tiguan, coches que
ofrecen grandes cotas de habitabilidad y por ello en el T-Roc encontramos un
generoso habitáculo y unos de los maleteros referencia en el segmente: 445
litros. Eso si, en caso de necesidad podemos llegar hasta los 1.290 litro
abatiendo los asientos, con posibilidad de hacerlo también en la proporción
60:40. La capacidad del maletero se ve ligeramente reducida hasta los 392
litros si nos hemos decidido por la versión 4Motion.
Exteriormente vemos
cierto parecido con alguno de sus “primos” del grupo como puede ser el Q2, pero
si miramos los números, el T-Roc es ligeramente mas ancho, mas alto y más
largo. El T-Roc es un coche que entra por los ojos y que a un simple vistazo,
sus líneas invitan a pensar que estamos ante un coche mas voluminoso de lo que
sus cifras de medidas nos dicen.
En su vista delantera
destaca sobre todo la gran parrilla, que acentúa el carácter del coche, un
coche moderno y acorde a las tendencias del mercado, e integra perfectamente
los faros que recuerdan lo que puede ser la nueva imagen de VW. Curiosas son
las formas de las luces diurnas que hacen que el diseño del T-Roc sea muy
novedoso y le dotan de una personalidad diferente. Están situadas bajo los
faros principales y colocadas en unos pequeños huecos que simulan unas entradas
de aire de ventilación para el motor de forma trapezoidal. Lo dicho, un
ejercicio de diseño que hacen del T-Roc un coche altamente atractivo.
En su vista lateral
destaca una tira cromada que dibuja todo el contorno de esta vista. Le confiere
ciertas de dosis de robustez y deportividad y convierte al T-Roc en un coche
diferente. En la parte trasera también podemos apreciar los faros con
tecnología LED y el enorme logotipo cromado en el centro del capot, coronando
el nombre identificativo del modelo: T-Roc. El parachoques no podía ir a la
zaga en cuanto a diseño y esta perfectamente integrado con los deflectores del
tubo de escape.
INTERIOR
Una vez hemos hecho la
pequeña descripción de lo que va a ve todo el mundo cuando esta aparcado en el
parking, vamos a ver lo que el afortunado propietario va a tener a su
disposición en el habitáculo. Nada mas abrir la puerta la sensación de amplitud
es muy grande y rápidamente los ojos se van a la enorme pantalla táctil de 8
pulgadas que preside la consola central, con modulo de navegación y compatible
con los sistema de comunicación Apple CarPlay y Android Auto. Pero hay mas, el cuadro de relojes esta
presidido por lo que VW llama Active Info Display, un cockpit digital de 11,7
pulgadas totalmente integrado tras el volante y en el que podemos ver toda la
información de la conducción a tiempo real, así como el GPS con el mapa a todo
color, música, etc.…
En cuanto a la
habitabilidad de las plazas traseras, dos adultos pueden viajar con total
comodidad, el “habitante” de la plaza delantera echara de menos algo más de
espacio pero tampoco podemos decir que viajara de forma incómoda.
MOTOR
La motorización que hemos
tenido ocasión de probar es el 10 TSI de 115 caballos. Es un motor curioso
divertido de utilizar, sobre todo si va asociado a una caja de cambio manual de
6 velocidades. Si queremos encontrar algo hay que pasar de las 2.000 rpm y a
partir de ahí, sube de una forma muy lineal hasta poco más de las 5.000 rpm.
Sin duda, un gran aliado de este tipo de motores es el turbo, el encargado de
darle vidilla.
En marcha, la sensación
general que se recibe es que es un coche cómodo, en el que a velocidades
legales apenas se siente el murmullo del aire pero si notas levemente la
rumorosidad y vibración del pequeño tres cilindros. La suspensión tiene un
toque lo suficientemente firme para transmitir una alta sensación estabilidad
al mismo tiempo que filtra eficientemente las irregularidades del asfalto.
CONCLUSIÓN
La conclusión que
obtenemos de la prueba del T-Roc es que estamos ante un coche que ha cuidado el
detalle al máximo y que por su motor 1.0 ha querido dejar un poco de lado las
cifras de prestaciones apostando por el equilibrio final del conjunto.