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Seguridad vial. Ángulo muerto y espejo 2.0
Nos lo explicaron cuando nos sacamos el carnet, pero mucha gente ha olvidado donde está y para que sirve, hasta que ocurre un accidente y dice “pero ese de donde ha salido”.

No tenemos más que una visión periférica de unos 170-180º, pero ver de verdad, la visión directa o nítida, tan sólo tenemos entre 8 y 12º (depende de la ubicación de los ojos y la nariz que tengamos), en el resto de grados tan sólo vemos movimiento y un poco los colores.

¿Sabemos ubicar exactamente donde tenemos el ángulo muerto?. Por lo general, los conductores lo ubican por detrás del vehículo, pero en realidad está a nuestro lado. A los dos lados del vehículo.

¿Dónde está exactamente?. Es el espacio que tienes al lado de tu coche, que va desde que dejas de ver el vehículo por el espejo retrovisor, hasta que aparece por el rabillo del ojo. Para que te hagas a la idea, en tu carril izquierdo, puede caber un coche de 5 metros entero sin que le veas ninguna parte de la carrocería, y una moto de casi 10 metros de largo (si existiera). Si en vez de estar en tu carril de al lado, está dos carriles más, puedes llevar un tráiler de 20 metros que tampoco lo verías. Imagínate si decides salir de una autovía desde el carril izquierdo y en el derecho hay un tráiler, miras por el espejo retrovisor y ese camión, para ti, no existe ¿te imaginas el resultado?.

¿Cuál es el problema de no ver lo que hay en el ángulo muerto?. Que cuando cambias de carril o el coche de al lado lo hace, no hay margen de maniobra para evitar el accidente, ese coche que tenemos al lado, para nosotros no existe. Te lo encuentras de golpe y sorpresa. No lo vemos por el espejo retrovisor ni mirando hacia delante, por lo que no hay porqué preocuparse, hasta que coindicen los dos coches en el mismo espacio y tiempo, y viene el golpe.

¿Cómo se regula el espejo retrovisor?. En las autoescuelas nos enseñan, y esta correcto, que debemos ver un poco nuestro coche. De esta manera tenemos una ubicación clara de donde está nuestro coche, respecto al coche que está a nuestro lado. Tanto por un lado como por el otro. En la maniobras, podemos ver claramente si nuestro coche está cerca de la columna esa viciosa, que se arrima a nuestro coche y nos lo roza. Nos hemos acostumbrado ya a verlo así. Si te funciona y no quieres mejorar, puedes parar de leer aquí.


A esto me refiero con ver un poco el coche.
Especialmente delicado es cuando vamos por una rotonda, pues los coches que tenemos a nuestro alrededor, aparecen y desaparecen en los peores momentos. Por ahí vienen muchos accidentes en las dichosas rotondas.

El espejo retrovisor tiene siempre el mismo ángulo de visión, y los fabricantes proponen varias fórmulas para que los veamos e intentar avisar de cuando tenemos vehículos a nuestro lado.
  • Ángulo más curvo al final, para que se pueda reducir algo más el ángulo muerto. Hoy en día lo traen casi todos los vehículos, aunque no en los dos espejos laterales, solo en el del conductor, ni que no hubiera peligro por el otro lado.
  • Cristal superior más abierto. En la esquina superior exterior del retrovisor, se parte el cristal para que se vea la imagen del vehículo. Antiguamente se ponía uno pegado. Con mucho tráfico es difícil discernir qué coche tenemos al lado y de noche no sabes si es una farola, un casa o un coche.
  • Radar lateral. Es quizás el mejor sistema de seguridad. Lo incorporan hoy en día muchos coches. El retrovisor tiene un radar que controla los coches que tenemos a nuestro lado. Cuando hay un vehículo o persona en esa zona, ilumina un testigo en color naranja, de advertencia. Si en ese momento ponemos el intermitente para indicar la maniobra, se ilumina en rojo y algunos modelos hasta pitan y vibran el volante, advirtiendo del peligro.





Todos estos sistemas están muy bien, pero desgraciadamente no todos los vehículos que hay en las carreteras lo tienen. Lo que sí que tienen todos los modelos es, la posibilidad de regular los espejos retrovisores.
Si ya hace unos cuantos años, o muchos, que te sacaste el carnet y quieres mejorar tu conducción, quizás es el momento de pasar a la versión 2.0.

Graduación del espejo retrovisor, mejorada (versión 2.0)
Si piensas que siempre se puede mejorar y valoras tu seguridad el volante, yo te recomiendo que pruebes durante un par de días, una versión mejorada. Si no te gusta o no te apañas, vuelve a la que tenía, que tampoco está mal, pero no veas mucho tu lado del coche, ¡eh!.

¿Qué voy a ganar con este cambio? Evidentemente el ángulo muerto no lo vamos a eliminar del todo, pero donde antes te cabía una berlina de 5 metros, en el carril de al lado, ahora tan sólo cabe un microcoche de apenas 2,5 o 3 metros. En una rotonda, solo te van a sorprender lo que vayan en monopatín o andando, pues hasta la bicis serás capaz de verlas.  Sólo con un pequeño gesto aumentará tu seguridad.


Las lineas rojas marca el nuevo ángulo del espejo y ya vemos la esquina del vehículo.

Vamos a ello
Cuando estemos parados y preparados para salir miramos el espejo retrovisor izquierdo. Nos quedamos con la referencia de cuanto coche vemos. Inclinamos la cabeza a la izquierda y miramos el espejo. Ahora veremos mucho más coche. Graduamos el espejo, abrirlo, hasta dejarlo como lo teníamos antes, pero con la cabeza inclinada. Hacemos lo mismo con el espejo derecho, inclinando hacia la derecha.

Cuando colocamos la cabeza recta, y miramos, ya no vemos nada de nuestro coche, ya que está enrasado al mismo, pero no se ve por el espejo retrovisor. El coche no se ha ido, está en el marco del retrovisor, si giramos la cabeza un poco ya le vemos, que es lo que podemos hacer al aparcar y ver si la columna nos roza el coche.
Pero lo importante es que esos grados que hemos abierto el espejo, nos hacen ver más parte de la vía y reducir el ángulo muerto, fácilmente, casi 2 metros. Por lo que será más difícil que nos encontremos por sorpresa un vehículo que no hemos visto antes.



Así debemos ver el espejo cuando miramos en conducción.

Especialmente en ciudad, que es cuando más a menudo miramos al espejo retrovisor, estaremos más tranquilos, pues vemos más vehículos y personas, que antes. Y no te digo nada cuando circules por las rotondas.

Por las autovías y autopistas, que quizás usamos más espejo central, para mirar más lejos, seguimos teniendo la misma visión que antes, pues lo limita el espacio y tamaño que tengamos en la luna trasera. Al igual que en el resto de vías.

Por cierto, última pregunta ¿Cómo saber si tú estás en el ángulo muerto del coche al que vas a rebasar?…. Si le ves la cara (y los ojos) al conductor, por su espejo retrovisor.

Insisto, pruébalo, si no te convence sigue a tu modo, pero si te acostumbras, es solo cuestión de unos días, habrás ganado mucho en tu seguridad y la del resto. También puedes ir abriendolo poco a poco hasta dejar de verlo. Como siempre, lo digo por experiencia propia.

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Abril 2020

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